El diseño: un sector que naufraga

Vanagloriarse de haber hecho un curso, por muy largo que este sea, con el que estar capacitado para ejercer el diseño porque así lo dice el gurú de turno, cuando la formación reglada de esta disciplina se extiende de media 3 años (yo hice 5) y se inscribe en el ámbito de la enseñanza superior, es cuando menos osado, aunque yo lo encuento una total falta de respeto. Pero ahí están estos personajes que todos conocemos y a los que no les negaré la inteligente utilización de los medios digitales para propagar su discurso. Y al final hemos tragado, vaya que si hemos tragado, nos hemos tenido que acostumbrar a bregar a diario con todos estos pseudo diseñadores y diseñadoras que encima se han incrustado a unas entidades que no tienen filtro alguno de inscripción y que les brindan cierta imagen de autoridad con la que te discuten, no solo la relativa importancia de la formación para diseñar, sino también tu propia capacidad: “Para mear y no echar gota”.

Ahora además, por si fuera poco, lo último que se ha puesto de moda en nuestro sector parece ser que es el coach de diseñador a diseñador. Durante los últimos meses han proliferado como hongos infinidad de cuentas en Instagram y otras RRSS regentadas por presuntos diseñadores (que no conoce nadie y que presentan una edad incompatible con una larga experiencia) que te ofrecen a ti diseñador de cualquier especialidad, cursos, consejos y recetas milagrosas para lograr buenos clientes, muchos proyectos y hacer rentable tu estudio. Vamos, lo que no han logrado ellos.

Pues yo os dejo aquí una clase totalmente gratis:

Fórmate y estudia diseño donde realmente toca, hoy podrás hacerlo de manera reglada cerca de casa en las decenas de escuelas y universidades que se extienden por todo el territorio.

Si te piden una silla no presentes una moto. Esta es una muy buena recomendación si quieres vivir del diseño.

Y teniendo claro de qué va esto del diseño, no hay muchos más secretos más allá de grandes dosis de pasión, esfuerzo y perseverancia, tres elementos capaces de vencer al talento, del que muchos no disponemos, y sortear las carencias que la mayoría tampoco tenemos.
Como de pasión diría que vamos todos sobrados, será que muchos abandonan el esfuerzo y la insistencia antes de que den resultados o no los manejan con la intensidad adecuada: mal hecho.

Diseñar es primero tener muy claro qué es el diseño y luego saber que es una carrera de fondo.

De nada.

No sé que pensáis vosotros de todo esto que está pasando en el sector. Personalmente, pienso que tolerar -por omisión- estas situaciones solo hace que evidenciar la debilidad que tenemos como colectivo. Nada extraño si consideramos que las asociaciones sectoriales han acabado siendo clubes de amigos.

Febrero 2025

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